Recuerdos en la noche...

Una noche, alguien golpeo mi ventana. Por un momento desee que fueras tu. Pero al asomarme solo vi las ramas del árbol que junto a mi casa vivía.
Volví a la cama, desolada, y me tape con aquellas suaves sabanas que tanto me gustaban. Cerré mis ojos pero tu recuerdo derrepente me atormento.

En la oscuridad de mi habitación apareció un olor tan conocido para mi. Tan dulce como tus caricias, tus palabras y tus besos. “Tan sólo un sueño, un dulce recuerdo de ti”, me dije a mi misma, pero mi mente ya no quería dormir, aunque mi cuerpo cansado se lo pedía, el prefería estar junto a ti.
La luz de la luna se coló por mi ventana y sus rayos plateados bañaron mi cara. El recuerdo de aquella noche me desveló. Una mirada, un sonrisa, no te puedo pedir mas. Me lo diste todo mientras me dejaba llevar por tus melodías y aun lo sigues haciendo, incluso cuando ya no estas junto a mi.

Y ahora la quietud me rodea. Y aunque en mi interior se desenvoque una tormenta, por fuera seguirá siendo todo igual. Esta noche te atrapare entre mis sueños, te abrazare y no te dejare ir jamás. Te besare y recordare tu calor, tu voz susurrandome al oído. Esta noche seras solo para mi.

Y con un poco de suerte, tu hayas soñado lo mismo. Y cuando los primeros rayos de sol surquen el horizonte, cuando vuelva a despertar y te deje marchar de mis sueños, el rubor de mis mejillas me recordara que solo por un momento fuiste mio.